
El Vaticano avanza en la preparación de la Capilla Sixtina para acoger el cónclave instalando las mesas y las estufas donde los cardenales quemarán sus votos con los que elegirán al sucesor del Papa Francisco.
En unas imágenes difundidas por el Vaticano este sábado se observa cómo los operarios continúan con las instalaciones en el interior de la Capilla Sixtina, montando las estructuras para las mesas y las estufas, después de que los bomberos completaran este viernes la instalación de la chimenea que anunciará al nuevo Papa.
El cónclave comenzará el 7 de mayo y tras cada votación saldrá humo por la chimenea. Si no se ha elegido ningún Papa el humo será negro y si ya se ha escogido al sucesor de Francisco la fumata saldrá blanca.
Un total de 133 cardenales menores de 80 años participarán en este cónclave para elegir al 267º sucesor de Pedro. Según ha informado la Santa Sede, hay dos ausentes por motivos de salud, uno de ellos es el cardenal español Antonio Cañizares, según confirmaron a Europa Press fuentes del arzobispado de Valencia.
Igualmente, respecto al cónclave, la Santa Sede ha aclarado que habrá dos votaciones por la mañana y dos por la tarde (en total, cuatro), con fumatas al final de la mañana y de la tarde, a menos que la elección se produzca antes de lo previsto, en cuyo caso el proceso se adelantaría.
El proceso de elección del nuevo Papa comenzará el miércoles a las 10.00 horas con una misa y a las 16.30 horas los cardenales se reunirán en la Capilla Paulina para rezar antes de dirigirse a la Capilla Sixtina.
Tras esto, tendrán que prestar un juramento con el compromiso de cumplir el 'munus petrinum' si son elegidos, así como de guardar secreto sobre todos los detalles que rodean la elección del nuevo Papa y de rechazar cualquier influencia exterior.
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