Madrid, 2 may (EFE).- El argentino Francisco Cerúndolo lamentó su derrota ante el noruego Casper Ruud que le deja fuera de la final del Masters 1.000 de Madrid, sobre todo por las numerosas oportunidades que tuvo ante un rival que tampoco brilló.
"Fue muy mal partido. Cometí muchos errores; por momentos jugué muy bien y en otros mal. Él tampoco jugó un gran tenis, pero tuve un mal partido", analizó Cerúndolo, que a pesar de la derrota completó un buen torneo y saldrá de Madrid entre los veinte mejores del mundo por primera vez en su carrera.
"Me voy contento y en un par de días sacaré lo positivo. Ahora todavía no, pero es mi segunda semifinal de un Masters 1.000 y no me puedo criticar por lo que hice esta semana", destacó el tenista bonaerense.
Cerúndolo reconoció que acusó la tensión, sobre todo ansiedad porque desperdició numerosas ocasiones.
"Nervios en el partido? Sí... no tanto los nervios, pero sí la ansiedad. Se me iban muchas oportunidades. Y cada vez que se te presenta una nueva la ves más difícil de concretarla. Tuve demasiadas oportunidades que no pude ganar".
"Ya es difícil generar millones de puntos de 'break' y yo los generé y no los pude concretar. Cuando jugaba pasivo, los ganaba él y cuando atacaba se me iban fuera. Tuve muchísimas oportunidades", insistió el sudamericano.
"Salgo con mi mejor ránking y ojalá pueda seguir mejorando. No jugué excelente en Madrid, pero sí a un buen nivel y con lo que me daba me defendí bien", resumió Cerúndolo, que piensa ahora en el Masters 1.000 de Roma.
"Espero que no me quite la confianza lo sucedido en este partido y que en Roma vuelva a jugar bien. En un partido les pasan a todos cosas como esta. Pero en tres días, cuando lo vea en perspectiva, lo veré mejor", señaló Cerúndolo.
"En mi mente ahora hay mucha bronca. Perdí jugando mal y aún así perdí muchas oportunidades porque él tampoco jugó excelente", lamentó. "Jugó mejor los puntos críticos que yo", subrayó. EFE