El costarricense Andrey Amador: "Es increíble" que Pogacar disputase la París-Roubaix

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Sant Antoni de Portmany (España), 18 abr (EFE).- El costarricense Andrey Amador, quien pasó 11 de sus 15 años como ciclista profesional en la estructura del Movistar español, calificó de "increíble" que un corredor de la talla del esloveno Tadej Pogacar (UAE) disputase la París-Roubaix, que finalmente se adjudicó el neerlandés Mathieu Van der Poel (Alpecin Deceuninck).

En una entrevista concedida a EFE con motivo de su participación en la 24ª edición de la Vuelta a Ibiza MTB Siroko by Shimano, que se disputa este fin de semana en esa isla mediterránea, el de San Ramón de Alajuela analizó la actualidad ciclista, que pasa por las clásicas de primavera y expresó su sorpresa por la participación de 'Pogi' en la exigente carrera conocida como 'El infierno del norte'.

"Me parece increíble que un corredor como Pogacar pueda ir a disputar la Roubaix. Yo soy el equipo y nunca me jugaría ese riesgo con la inversión que hay, con la responsabilidad que pueda haber. Las probabilidades de caídas con muy altas", indicó el costarricense de 38 años.

En su opinión, "que corra Pogacar es bueno para la afición, pero los equipos no lo ven igual, porque es tanta su superioridad que condena al anonimato a los demás".

"Nadie sabe quién ha sido cuarto o quinto. Todos están condenados a luchar por esas posiciones", concluyó.

El pasado 13 de abril, Van der Poel se proclamó por tercera vez consecutiva vencedor de la París-Roubaix, disputada en su 12ª edición entre Compiègne y el Velódromo André-Pétrieux, en la localidad que da nombre a la prueba.

La prueba tuvo como punto estelar el duelo entre el ganador y Pogacar, quien sufrió un percance a 38 kilómetros de meta, lo que permitió al neerlandés abrir una diferencia que ya fue definitiva para ganar e igualar los tres triunfos consecutivos de Francesco Moser (1978, 1979 y 1980).

El esloveno se salió en una curva, sufrió una leve caída y perdió unos segundos aprovechados por Van der Poel para marcharse en solitario. EFE

(foto)