Budapest, 12 abr (EFE).- Miles de húngaros han tirado este sábado del humor y de la ironía para defender la diversidad y la democracia liberal frente a las políticas del Gobierno ultranacionalista de Viktor Orbán y su reforma legal que prohíbe en la práctica la marcha del orgullo LGTBQI+.
'Seamos todos iguales y grises' es el lema con el que el Partido del Perro de Dos Colas (MKKP), una formación satírica sin representación parlamentaria pero muy popular, ha convocado una marcha por el centro de la capital en la que participaron varios miles de personas, como pudo comprobar EFE.
"Es especialmente importante defender a las personas LGTBQI+", ha asegurado ese partido en un comunicado, recordando la seriedad de la protesta pese al tono festivo e irónico que ha tenido.
La marcha, que tuvo su origen y su final en la céntrica 'Plaza de los Héroes', fue anunciada por sus organizadores como del "orgullo iliberal", en alusión al sistema 'iliberal' que defiende Orbán y que mantiene el respeto a la celebración de elecciones pero prescinde de muchos otros elementos de las democracias occidentales.
El recorrido de la marcha se diseñó para dibujar un pene sobre las calles de la ciudad, en un claro mensaje hacia Orbán.
Al llamado del MKKP, los participantes han vestido todos de gris para "ser iguales" e incluso han ondeando banderas del arcoiris, símbolo de la diversidad y el orgullo LGTBQI+, pintadas solo de blanco, negro y gris.
"Todos los problemas del mundo vienen de la diversidad y de la individualidad", aseguró el MKKP en un comunicado en el que se burlaba de las políticas del Gobierno que limitan cada vez más los derechos de la comunidad LGTBQI+ en el país.
"Si todo el mundo fuera igual y todos pensaran igual, ¡no habría guerras! Además de Bruselas, la diversidad es el otro responsable de la guerra", afirmaron, ironizando sobre cómo Orbán acusa a la Unión Europea (UE) de belicismo por apoyar a Ucrania frente al ataque de Rusia.
La reforma legal aprobada en marzo, con la mayoría absoluta del Fidesz, el partido de Orbán, prohíbe "las reuniones que promuevan o exhiban el cambio de sexo de nacimiento o la homosexualidad", así como la participación en ellas, todo en nombre de la defensa de los menores y su desarrollo "adecuado".
El texto prevé multas y el uso de tecnologías de "reconocimiento facial" para identificar a los participantes de estos encuentros.
Partidos opositores, ONG y organizaciones de la comunidad LGTBQI+ han denunciado que con esta ley se podrá prohibir la marcha de Orgullo, que se prevé para finales de junio, como acto final del mes Budapest Pride.
Orbán llegó al poder en 2010 y en los últimos 15 años su Gobierno ha limitado legalmente los derechos de la comunidad LGTBIQ+.
Su mayoría parlamentaria aprobó una nueva Constitución de 2011 en la que fijó que el matrimonio es la unión de un hombre y una mujer.
El Gobierno también ha promovido una ley que prohíbe que la parejas del mismo sexo puedan adoptar a niños. EFE
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