Londres, 8 abr (EFE).- La española Repsol se ubica en primera posición de la clasificación de las grandes productoras mundiales de petróleo y gas por su alineamiento con los objetivos del Acuerdo de París, pese a que todas las compañías analizadas quedan lejos de alcanzarlos.
El informe 'Paris Maligned III', que realiza el centro de estudios climáticos Carbon Tracker a partir de ciertos indicadores, muestra que ningún gran productor se encuentra cerca de cumplir los objetivos y que muchos han retrocedido en el último año.
En concreto, el estudio halla que empresas europeas como BP (antigua líder de la lista), Eni, Equinor, Shell y TotalEnergies han dado pasos atrás por el aumento de sus metas de producción, tanto a corto como a largo plazo.
En el caso de Repsol, la española ocupa el primer lugar en el ránking de este año tras haber mejorado su puntuación en un punto frente a 'Paris Maligned II', publicado el año pasado.
La compañía española destaca por planificar una disminución en la producción a corto o largo plazo de hidrocarburos, lo que contribuye a su alta puntuación.
Repsol espera actualmente una reducción del 4 % en la producción para lo que queda de década, tomando como referencia el nivel de 2023. Si bien se trata de una revisión al alza frente a su objetivo anterior, continúa siendo una disminución modesta de emisiones, apunta el laboratorio de ideas.
En la clasificación, 7 de los primeros 10 puestos son ocupados por compañías europeas, encabezadas por Repsol, que toma la primera posición "en parte por ser una de las únicas dos empresas con planes de recortar la producción de hicrocarburo", mientras que la británica Harbour se sitúa en segunda posición.
Otro dato apunta a que las compañías petroleras estatales tienen esta vez un peor rendimiento y que tres de ellas, PEMEX, Sonatrach y KPC, junto con la estadounidense ConocoPhillips, ocupan la última posición conjunta.
En las últimas semanas han salido a la luz muchos ejemplos de los retrocesos climáticos ocasionados por culpa de las decisiones adoptadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que ha virado sus políticas a favor de los productores de petróleo y gas, advierte el documento.
Pero según Carbon Tracker, las políticas estadounidenses no son el factor principal tras esa regresión sino que hay otros elementos que desempeñan papeles significativos, como la guerra en Ucrania o los altos tipos de interés.
El análisis "pone de relieve dudas acerca de que el sector sea capaz o esté dispuesto a posicionarse hacia un alineamiento con los objetivos del Acuerdo de París".
Rich Collett-White, autor principal del informe, indicó en un comunicado que "la mayoría de productores están ignorando la demanda y continúan lejos del camino alineado con el Acuerdo de París".
'Paris Maligned III', el primer análisis del sector elaborado desde la reelección de Trump, muestra nuevos datos que subrayan el espacio cada vez más amplio que separa los planes de las petroleras y gasísticas y la ciencia climática.
Subraya que en el actual contexto de turbulencias geopolíticas -como la guerra en Ucrania y las políticas cambiantes de Estados Unidos- las firmas de combustibles fósiles se alejan de los objetivos internacionales climáticos. EFE