Lima, 7 abr (EFE).- La presidenta de Perú, Dina Boluarte, afirmó este lunes que los clubes de fútbol no pueden seguir siendo "cómplices pasivos de la violencia" entre los grupos de ultras, conocidos en el país como barras bravas, y añadió que el Ejecutivo tomará acciones para determinar responsabilidades civiles ante estos hechos.
"Hay un frente que nos duele. La violencia disfrazada de pasión futbolística. Lo decimos con claridad, las barras bravas que generan caos, que destruyen, matan; no son hinchas, son delincuentes y a los delincuentes se les persigue y castiga", enfatizó Boluarte.
La mandataria abordó este problema desde la reunión diaria que celebra en el Palacio de Gobierno junto a ministros, altos mandos policiales y militares y otras autoridades, conocida como "cuarto de guerra", tras lo cual ofrece detalles de las acciones diarias en la lucha contra la criminalidad.
"Los clubes de fútbol no pueden seguir mirando hacia otro lado, no pueden ser cómplices pasivos de esta violencia. Vamos a iniciar las acciones necesarias para determinar responsabilidades civiles y si es necesario, sancionar a los que no asuman su deber con la sociedad", sostuvo.
En ese sentido, hizo un llamado para dejar de llevar "narrativas falsas" en contra de "la tranquilidad de las personas y en contra de la patria", y aseguró que el Estado no lo va permitir.
"Basta de más violencia en estadios y calles, basta de querer subirse al carro político con ideologías anarquistas desfasadas en el tiempo", dijo la presidenta.
Este sábado, antes de que se disputara el clásico del fútbol peruano entre Universitario y Alianza Lima, se vivieron episodios de violencia en varios puntos de la capital entre ultras de ambos equipos.
Medios locales mostraron imágenes de una gran pelea con piedras y palos en una vía pública, en la que tuvo que intervenir la Policía y lanzar gases lacrimógenos, mientras que en el sur de Lima, supuestos aficionados del Alianza dieron una paliza a un joven que tuvo que ser hospitalizado. EFE