Reino Unido presenta un documento de 417 páginas y miles de productos de cara a posibles represalias a EE.UU.

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El Gobierno del Reino Unido ha presentado este jueves un documento de 417 páginas en el que se incluyen miles de referencias de productos con origen en Estados Unidos cuya importación es susceptible de ser gravada con aranceles adicionales en respuesta a las medidas proteccionistas anunciadas ayer por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Las autoridades británicas han subrayado que se trata de "una lista indicativa de productos" que podrían estar sujetos a cualquier futura respuesta arancelaria del Reino Unido, por lo que no todos los productos que aparecen en el documento se verán finalmente sujetos a una tasa que grave su importación al país británico.

El secretario de Empresa y Comercio del Reino Unido, Jonathan Reynolds, ha destacado que Reino Unido fue uno de los países al que Trump impuso ayer "el arancel recíproco más bajo del mundo", después de que el presidente de EE.UU. anunciase una tarifa del 10% sobre las exportaciones británicas, además del arancel del 25% sobre los automóviles y las tasas del 25% sobre las importaciones estadounidenses de acero, aluminio y productos derivados, anunciadas el 12 de marzo.

"Estamos decepcionados por el aumento de los aranceles en Reino Unido y en otros países del mundo", ha asegurado, advirtiendo de que su impacto se sentirá en todas las naciones con las que comerciamos.

Reynolds ha subrayado que el Gobierno británico sigue negociando con el de Estados Unidos sobre un acuerdo económico entre ambos países que, no sólo evite la imposición de aranceles significativos, sino que profundice su relación económica en todos los ámbitos.

"Puedo confirmar a la Cámara que dichas conversaciones continúan y seguirán así. Este Gobierno considera que un acuerdo no solo es posible, sino que es favorable para ambos países", ha asegurado.

Sin embargo, si bien el ministro ha defendido que la mejor vía hacia la estabilidad económica es un acuerdo negociado con Estados Unidos ha advertido de que Londres se reserva el derecho a tomar "las medidas que considere necesarias si no se logra un acuerdo".

De este modo, para que el Reino Unido tenga todas las opciones a su disposición en el futuro, ha presentado este jueves una solicitud de información sobre las implicaciones para las empresas británicas de posibles represalias.

"Solicitaremos la opinión de las partes interesadas del Reino Unido durante cuatro semanas, hasta el 1 de mayo de 2025, sobre los productos que podrían incluirse en cualquier respuesta arancelaria del Reino Unido", ha anunciado, añadiendo que, si Reino Unido logra un acuerdo económico con EE.UU. que elimine los aranceles impuestos a sus industrias, "esta solicitud de información se suspenderá y cualquier medida derivada de ella se levantará".