Damasco, 8 ene (EFE).- Al menos 131 personas han sido asesinadas o ejecutadas de forma extrajudicial en Siria tras el derrocamiento del régimen del presidente Bachar al Asad hace un mes, dijo este miércoles el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que denunció que existe "un estado de pánico y miedo entre los civiles".
Según el recuento de la ONG, con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno, estas personas fueron asesinadas en 67 actos registrados principalmente en el oeste de Siria y entre las víctimas se encuentran "mujeres y niños".
"La situación de seguridad comenzó a deteriorarse rápidamente, se ha producido un notable aumento en la frecuencia de los asesinatos aleatorios y las ejecuciones extrajudiciales, que se han convertido en un espectáculo diario en muchas zonas", denunció la organización.
Según el Observatorio, las provincias centrales de Hama y Homs "fueron testigos de la mayor parte de estos crímenes", ya que estas demarcaciones administrativas son ahora "focos de violencia e inseguridad".
Esos actos también se registraron en las regiones costeras de Latakia y Tartus, donde prevalece "la ausencia casi total de autoridad legal y una creciente influencia de grupos armados rivales" a los que no identificó.
Ante esta situación, el Observatorio pidió a las nuevas autoridades de Siria que "intensifiquen sus esfuerzos para restablecer la estabilidad, controlar el empeoramiento del estado de caos y detener de inmediato los crímenes que amenazan la paz civil".
También insistió en que todas las operaciones para detener a miembros del antiguo régimen de Al Asad o de facciones armadas "se basen en pruebas claras y documentadas, con órdenes judiciales oficiales que garanticen el respeto de los derechos de las personas y las protejan de abusos".
En este sentido, alertó del peligro de que personas desconocidas se hagan pasar por efectivos del Mando de Operaciones Militares -el brazo armado de la coalición rebelde islamista que derrocó a Al Asad- con el objetivo de llevar a cabo crímenes y violaciones de los derechos humanos.
Las nuevas fuerzas de seguridad de Siria han iniciado varias campañas de arrestos en diferentes puntos del país contra criminales y miembros del antiguo régimen, operativos en los que el Observatorio ha denunciado que se han visto prácticas de abusos e incluso de tortura. EFE