(Actualiza con declaraciones del ministro danés de Exteriores sobre presencia de otros países)
Helsinki, 19 dic (EFE).- La policía sueca ha abordado este jueves por invitación de Pekín el carguero chino sospechoso de haber estado involucrado en la rotura de dos cables submarinos en el mar Báltico el mes pasado, mientras que según el Gobierno danés también están presentes representantes de Dinamarca, Finlandia y Alemania, los otros países afectados por el caso.
"Unos representantes de las autoridades chinas están realizando investigaciones en el barco y han invitado a las autoridades suecas para participar en calidad de observadores. La Comisión Nacional de Investigación de Accidentes también participa", informó la policía sueca en un comunicado.
Los agentes suecos a bordo del barco, que lleva más de un mes bloqueado en el estrecho de Kattegat, en aguas internacionales entre Dinamarca y Suecia, "no están realizando ninguna medida investigativa", precisó la institución.
Las pesquisas que se están realizando en el Yi Peng 3 este jueves, destacó el comunicado, no forman parte de las diligencias preliminares por un posible delito de sabotaje abiertas bajo la autoridad del fiscal del Estado sueco Henrik Söderman, en las que participan también conjuntamente Finlandia y Lituania.
"Estamos aquí observando lo que hacen las autoridades chinas", declaró un portavoz de la policía sueca, Per Engström, a la cadena pública SVT.
Estocolmo había solicitado con anterioridad a Pekín que se les permitiera examinar el carguero, para completar la investigación submarina que se ha realizado ya en los puntos en los que se descubrieron daños en los cables submarinos.
Según señaló el ministro de Exteriores danés, Lars Lokke Rasmussen, en una comparecencia este jueves, a bordo del barco se haya también un observador danés, así como representantes de Alemania y Finlandia.
"Naturalmente ha habido un interés de todos los países afectados por los daños a los cables y por supuesto Dinamarca, porque el barco también ha navegado por aguas danesas, por llegar al fondo de este asunto", dijo según la agencia Ritzau.
Por ello se declaró "satisfecho" de que haya sido posible negociar este "modelo", que implica que los representantes de todos los países puedan visitar el barco de forma colectiva.
Además, Rasmussen manifestó la expectativa de que una vez que se haya completado la inspección, el carguero pueda seguir navegando hacia su destino después de más de un mes inmovilizado.
Los daños en los cables de datos -uno de ellos entre Finlandia y Alemania y el otro entre Suecia y Lituania- se produjeron posiblemente entre el 17 y el 18 de noviembre y todos los países afectados han expresado sospechas de que pueda tratarse de un caso de sabotaje.
La posición del Yi Peng 3, que zarpó del puerto ruso de Ust-Lugá y se dirigía a Egipto, coincide geográfica y temporalmente con los daños, según los datos de tráfico marítimo.
El caso recuerda al del mercante chino Newnew Polar Bear, cuya ancla dañó el año pasado, también en el Báltico el gasoducto submarino Balticconnector y un cable de telecomunicaciones, ambos entre Finlandia y Estonia, de acuerdo con las autoridades chinas de forma accidental. EFE