Moscú, 21 oct (EFE).- El centro de apoyo a la comunidad LGBT 'Luptă' de la ciudad rusa de Yekaterimburgo, en los Urales, anunció hoy su cierre debido a la presión de las autoridades rusas, que han declarado extremista al movimiento LGBT y prohibido los cambios de sexo.
"Noticias importantes y tristes: el proyecto Luptă deja de funcionar, nuestro centro comunitario ha cerrado. Fue una decisión muy dura para nosotros, tan compleja como los tiempos que afrontamos", indicó el centro en su canal de Telegram.
'Luptă' denunció que "los últimos dos años han sido destructivos para la comunicad 'queer'".
"El proyecto 'Luptă' no podrá continuar trabajando debido a las presiones del entorno 'queerfóbico'. Nuestra prioridad siempre fue garantizar la seguridad de nuestro espacio, lamentablemente no podemos continuar garantizándola", añadió el centro.
Agradeció a quienes participaron en sus actividades en el último año y medio pese a las presiones de las autoridades y aseguró que "nos sentimos orgullosos y creemos que el futuro 'queer' llegará".
Rusia prohibió en noviembre del año pasado el movimiento internacional LGBT al considerarlo una "organización extremista", si bien las autoridades matizaron que esta decisión "no afecta al derecho de los ciudadanos a la vida privada", ya que la homosexualidad dejó de ser un delito en este país en 1993.
Un año antes la Duma (cámara de diputados) aprobó una ley que prohibía totalmente la propaganda LGBT, la pedofilia y el cambio de sexo, a lo que siguió la prohibición de las operaciones quirúrgicas de cambio de sexo, lo que provocó una gran alarma entre la comunidad transexual. EFE
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