
(Bloomberg) -- Elon Musk declaró que la mayoría de los anunciantes que abandonaron Twitter tras su adquisición por un valor de US$44.000 millones han regresado, y añadió que la empresa podría tener un flujo de caja positivo tan pronto como este trimestre.
En una atípica entrevista en Twitter Spaces con la BBC, Musk dijo que solo quedan 1.500 de los 8.000 empleados que había antes, y reafirmó que Twitter está funcionando en torno al umbral de rentabilidad. Más de 3 millones de usuarios sintonizaron la conversación de casi dos horas, que en ocasiones se tornó combativa cuando el multimillonario le dio la vuelta a su entrevistador y cuestionó el historial de la BBC en todo, desde la desinformación sobre el covid hasta el discurso de odio.
Twitter registró un flujo de caja positivo en julio, en su último informe de resultados antes de la culminación de la tumultuosa adquisición de Musk. La compañía arrastraba una deuda de miles de millones de dólares desde la operación, por lo que restaurar su rentabilidad podría servir de alguna manera para validar los drásticos recortes de personal e instalaciones que Musk llevó a cabo, aunque también se le ha acusado de no pagar diversos gastos de la empresa, desde alquileres de oficina e indemnizaciones de exempleados, hasta honorarios legales de exejecutivos.
Musk dijo que solo había completado la compra de Twitter el año pasado porque se vio obligado legalmente a hacerlo, luego de que la junta directiva de la compañía lo demandara para cerrar el trato. Más tarde agregó que probablemente no vendería Twitter incluso si le ofrecieran hoy el mismo precio.
La mayoría de los anunciantes ahora están de vuelta en la plataforma, dijo Musk, luego de un éxodo provocado por despidos masivos y fallas técnicas que generaron preocupaciones sobre la posible proliferación de discursos de odio, noticias falsas y otros contenidos objetables.
“Casi todos regresaron o dijeron que regresarían”, dijo Musk.
Eso sería un gran cambio. En las semanas posteriores a la adquisición, cientos de anunciantes pusieron en pausa su gasto en la plataforma, desconfiados ante los cambios que se avecinaban. De septiembre a octubre del año pasado, los 10 principales anunciantes de Twitter gastaron US$71 millones en anuncios, según estimaciones de Sensor Tower. Esa cifra se redujo a solo US$7.6 millones, lo que supone un descenso del 89%, según un informe de la empresa de investigación publicado el 31 de marzo.
Uno de los usuarios que abandonó recientemente la plataforma es National Public Radio (NPR), que anunció el miércoles, que sus 52 cuentas oficiales ya no publicarán contenido después de que Twitter etiquetara al medio de comunicación como “medios afiliados al Estado”. Aunque esto se revisó más tarde a “medios financiados por el Gobierno”, la cadena de radio pública estadounidense dijo que era inexacto y engañoso.
Gran parte de la sesión del martes, que Musk dijo que se había organizado apresuradamente después de que un reportero de la BBC le enviara una pregunta, tocó temas ya conocidos. Musk habló de despedir a miles de personas (tenía que hacerse), de sus mayores desafíos en los últimos seis meses (cerrar uno de los tres centros de datos, lo que provocó interrupciones) y de dispararse en constantes ocasiones en el pie con tuits impulsivos (“Necesito zapatos a prueba de balas”).
El ejecutivo, cuyos otros trabajos diarios incluyen dirigir Tesla Inc. y Space Exploration Technologies Corp., se mostró evasivo en ocasiones y brutalmente directo en otras. La mayoría de las preguntas se centraron en su forma de pensar desde que lanzó una oferta por la plataforma de redes sociales el año pasado.
Con respecto al futuro de Twitter, Musk dijo que no prevé que ninguna red social sobreviva sin verificación pagada. Se refería a las críticas sobre el cobro de Twitter de US$8 por las marcas de verificación azules que alguna vez confirieron legitimidad a organizaciones y figuras públicas. El martes, reiteró su postura de que la barrera de pago era la única forma viable de evitar que los bots inundaran una plataforma en línea.
En una sesión de preguntas y respuestas posterior a la entrevista con los oyentes de Spaces, Musk también abordó la fusión de Twitter con la empresa fantasma recién formada llamada X Corp. “Sí, hay algo más”, dijo el multimillonario. Musk sigue queriendo crear X, una aplicación para todo similar a WeChat de Tencent Holdings Ltd.
En la seprenteante conversación se abordaron desde temas serios, como el manejo del sexismo, hasta los más absurdos, como cuando el multimillonario afirmó que su perro era ahora el director ejecutivo de Twitter.
“Yo no soy el CEO de Twitter. Mi perro es el CEO de Twitter”, dijo Musk entre risas. “Lleva un suéter negro de cuello alto, ¿qué más necesita?”
Nota Original:Musk Says Twitter Could Become Cash-Flow Positive This Quarter
--Con la colaboración de Craig Trudell.
More stories like this are available on bloomberg.com
©2023 Bloomberg L.P.
Últimas Noticias
El Rey Felipe VI asistirá al Festival Aéreo 'Aire 25' para conmemorar el 40 aniversario de la Patrulla Águila
El festival aéreo 'Aire 25' en la Base Aérea de San Javier reunirá a destacadas patrullas acrobáticas para celebrar cuatro décadas de la Patrulla Águila y mostrar aeronaves nacionales e internacionales

AMP. Carlos Sainz protagoniza este sábado una exhibición con Williams en el futuro Madring
Carlos Sainz será el protagonista de una exhibición gratuita de Fórmula 1 en el futuro circuito de Madring, acompañado por pilotos de Fórmula 2 y F3, con acceso facilitado por transporte público

Pere Romeu: "Es muy difícil preparar una final con tan pocos días de margen"
Pere Romeu destaca la dificultad de preparar la final de la Copa de la Reina tras el último partido de la temporada y subraya la importancia de mantener la posesión ante el Atlético de Madrid

Zelenski podría reunirse con Trump durante la cumbre del G7 en Canadá
Andrei Yermak confirma que la reunión entre Volodimir Zelenski y Donald Trump podría realizarse en la cumbre del G7 en Kananaskis, Canadá, para avanzar en negociaciones de paz

Previa del Barça Femení - Atlético de Madrid
El Barça Femení y el Atlético de Madrid se enfrentan en la Copa de la Reina, en busca de un título que define sus respectivas temporadas en El Alcoraz
